Este tema para mí es bastante claro. Todo el mundo tiene derecho a molestar una o dos veces al año a lo sumo. Igual nos pasa a cada uno, alguna vez tenemos barbacoa nocturna y simplemente con la charla ya molestamos bastante.
Todo lo que esté por encima de eso, me parece una falta de civismo por no llamarlo de otra forma. Es cierto que se pueden cerrar las ventanas, pero eso no impide que el ruido llegue, y para las personas que tienen problemas para dormir, es un suplicio.
Ya hay alcaldes que han ido a la carcel por no actuar en repetidas denuncias contra los ruidos...