Pues si busca una financiación tan buena como la nuestra que se preparen los pobres abuelos.
Diario de Burgos Digital Martes, 18 de Mayo de 2010
La Cooperativa San Bruno busca financiar 150 apartamentos tutelados en el S-4
Estas viviendas, igual que las 120 de Villarcayo, irían destinadas a mayores de 65
La Cooperativa San Bruno pretende construir 150 apartamentos tutelados para mayores de 65 años en el S-4. Sin embargo, para poder presentar el proyecto al Ayuntamiento de Burgos, propietario de la parcela dotacional donde se ubicarían estas viviendas, es necesario conseguir financiación, tal y como sostiene el administrador, Esteban Gutiérrez Mansilla, quien apunta que está «a la espera», porque las entidades financieras «están estudiando la idea».
Una vez que se consiga la inversión necesaria, el siguiente paso sería presentar una oferta del Consistorio, aunque por el momento no hay fecha concertada, explica Gutiérrez y remarca que el proyecto está «aún muy verde».
No obstante, si sigue hacia delante, la Cooperativa San Bruno llegaría a construir un total de 270 apartamentos, puesto que en abril se dio a conocer que su administrador estaba buscando fondos para la promoción de viviendas de protección oficial en un solar de la calle Doctor Albiñana de Villacaryo. En ambos casos, estas iniciativas se enmarcarían dentro del Plan Estatal de Vivienda y Rehabilitación 2009-2012, que contempla la mejora del acceso y del uso de la vivienda por parte de los ciudadanos con dificultades.
Sin embargo, la construcción de apartamentos tutelados es una idea que existía ya en el año 2007, momento en que surgió en acuerdo con la constructora Aragón Izquierdo la posibilidad de crear un bloque gemelo a las torres que esta promotora de viviendas levantó al final del Parque Europa. A pesar de ello, las últimas informaciones apuntan a que este bloque se usará como residencia para trabajadores.
MAYOR LIBERTAD. Para la Federación de Pensionistas y Jubilados de CCOO en Burgos, la puesta en marcha de apartamentos tutelados, tanto en la ciudad como en la provincia, supone «una gran satisfacción», ya que, a su juicio, «este tipo de residencias tienen un carácter más humano que las actualmente existentes, donde la asistencia es generalísima, existe poca libertad de decisión y todo se da hecho», aseguran desde este sindicato. Se trata de un modelo que permite vivir al usuario de forma individual o colectiva, «según elija», y cuando es imposible atenderlo particularmente «puede optar por servicios comunitarios».