Lo que a priori podría parecer una mala noticia: la vivienda protegida será de promedio un 4,4% más cara a partir de la entrada en vigor del real decreto que se apruebe mañana ; está pensado para conseguir justo el efecto contrario. Es decir, como sube el precio máximo al que una vivienda protegida, tanto nueva como usada, podrá venderse, la oferta de esta clase de inmuebles se incrementará y más familias tendrán opción a comprar o alquilar una de estas casas a precios asequibles.
Además, viviendas que hasta ahora eran consideradas de precio libre, gracias a esta modificación del plan cuatrienal pasarán a ser catalogadas como protegidas y sus propietarios tendrán derecho a solicitar las correspondientes ayudas públicas.
Así, el real decreto, que ayer fue debatido por el ministerio y las comunidades autónomas en conferencia sectorial, contempla un aumento del precio básico de referencia de la vivienda protegida hasta los 760 euros el metro cuadrado de superficie útil, lo que representa un incremento del 4,4% sobre los 728 euros vigentes hasta ahora.
También eleva el tipo de interés efectivo de los préstamos convenidos desde el 4,35% al 5,09%, cuantía que será de aplicación desde el primer vencimiento que se produzca, transcurrido un mes de la publicación del citado real decreto en el Boletín Oficial del Estado.
Pero es que además de esa subida generalizada que se aplicará a toda la nueva VPO, el borrador de real decreto establece que en aquellos ámbitos territoriales donde los inmuebles son más caros las casas protegidas podrán encarecerse aún más para acercarse de ese modo a los precios que establece el mercado libre.