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¿Cuáles son los tipos de tabiquería y sus ventajas?
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TABIQUES DE PLADUR
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Existen varios tipos de tabiquería, dependiendo del material que se emplee. Cada uno de ellos posee técnicas de construcción propias.
Antiguamente, las participaciones y divisiones interiores en el hogar se realizaban con piezas de cerámica, dando lugar al ladrillo, con el que se han venido ejecutando los tabiques hasta el momento actual. En los últimos años avanza progresivamente la utilización de un nuevo material, constituido por paneles de cartón‑ ;yeso o por placas de yeso laminado, que tiene como principal ventaja la de tratarse de una tecnología seca, que no necesita agua para su ejecución, ni la utilización de morteros, por lo que es una técnica limpia, con el mínimo desperdicio de material. Esto hace que sea una opción muy recomendable en reformas, aunque también se ha incrementado notablemente su uso en obra nueva.
El tabique está compuesto por una estructura metálica interior, con un relleno de aislamiento térmico, y en cuyo exterior se disponen sendos paneles de yeso revestidos por ambas caras de un acabado especial, para poder pintar sobre ellos o dejarlos vistos.
Esta tabiquería tiene la ventaja de permitir que las instalaciones de agua, electricidad, telefonía y telecomunicaciones se dispongan en su interior, sin necesidad de hacer rozas en las paredes. Por ello se trata de un sistema muy limpio y cómodo, que evita la realización de obras complementarias y que garantiza que las paredes quedan con su superficie perfectamente plana.
Antes de su colocación, se requiere que las fachadas, las cubiertas o los muros en contacto con las placas de yeso laminado estén totalmente terminados, y colocadas las carpinterías, los huecos exteriores acristalados, y los suelos nivelados, pudiendo tener ya colocado el pavimento o solado.
El montaje de los tabiques comienza con el replanteo de suelo y techo, marcando la situación de los cercos y huecos. Se colocan y anclan los perfiles sobre el solado y bajo el techo con un enlucido de yeso, a no ser que se disponga posteriormente de falso techo. Después se colocan los elementos verticales, fijándose las placas a los montantes mediante tornillos, quedando algo separadas del suelo terminado, y a tope en el techo. Por último se realiza el tratamiento de las juntas, para dejar la superficie del tabique totalmente homogénea.
Este tipo de tabiquería se puede colocar en cualquier espacio. Puede realizarse en cuartos húmedos, como los baños y cocinas, teniendo en cuenta que en estos casos la placa será de color verde, en vez de blanca que es la utilizada normalmente. El color verde indica que tiene como característica especial ser resistente a los efectos de la humedad.
El control del acabado incluye la revisión del espesor de las particiones, el tipo y dimensiones de los perfiles y su anclaje a suelos y techos. Deben quedar correctamente aplomados y respetar las juntas de dilatación que tenga el edificio, para evitar la aparición de fisuras en las paredes. En cualquier caso, se recomienda acudir a un instalador autorizado o realizar un estudio técnico para decidir la solución más adecuada a cada vivienda y sus posibles alternativas