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Sobre si el poder corrompe o la fuerza de la policía
Paracuellos 13/04/11.- En los mentideros del municipio, que es ese sitio donde nada se puede creer (siempre según la clase política claro), se viene escuchando una noticia, que si pasa desapercibida, es por lo habitual que resulta oir las historias de algunos de sus protagonistas.
Que el poder corrompe es algo tan antiguo como la propia existencia de la sociedad. Que la fuerza de seguridad municipal esta compuesta por niñatos arrogantes no es un refrán, pero es una realidad, tan lamentable como la propia clase política en si, no es necesario dar mas explicaciones.
Hace unos días, dos conciudadanos paseando se encontraron una cartera, con documentación y, ademas, con "premio"; doscientos euros y unos cuantos billetes de loteria. Nuestros buenos samaritanos fueron preguntando si alguien sabía quien era el dueño, al final se encontraron a unos transeuntes que le conocían, y estos se hicieron responsables de devolverlo, con todo el contenido, claro.
Los segundos encargados de la devolución, no pudiendo devolver la cartera a su legítimo dueño, tomaron la decisión mas lógica, esto era llevar la cartera, íntegra en su contenido (lo digo aunque suene reiterativo) a la policía municipal.
Al día suiguiente el dueño por fin apareció, y tuvo la idea de agradecer en persona, a todos los actores de tan absurda aventura, su colaboración.
La sorpresa vino, para unos y para otros, cuando entre la historia de la devolución y la de la recuperación apareció (o desapareció, siempre segun se mire) un dato que no cuadraba; exactamente doscientos euros y unos cuantos billetes de loteria.
Si los que encontraron la cartera y los que la llevaron a comisaria dijeron al dueño "que si, que menuda suerte, pierdes una cartera así y te la devuelven tal cual se extravió", es una conversación de esperar.
Que el dueño responda preguntando;"¿tal cual se extravió?" no debería ser tan normal, pero en municipios como Paracuellos parece ser que esta a la orden del día, como las consiguientes amenazas de la policía a los ciudadanos cuando fueron a quejarse formalmente a la comisaría.
Sinceramente no creo que les sirva de mucho a nuestros vecinos quejarse ni poner denuncias, pues siempre su palabra ante la ley no vale nada contra la de un agente de policía.
P.L.