Soy un comprador de Amenabar Arroyofresno VPPL y según pasa el tiempo mas desconfianza tengo en la vivienda que he comprado. La actitud mostrada por el constructor me hace dudar si hice bien firmando un contrato de compraventa por una vivienda de 300.000 euros.
No es nuevo en este foro el tema de los cambios en las terrazas, que de momento es lo único que podemos ver desde la calle, pero creo que si después de un mes no se dignan en contestar... realmente me siento frustrado.
Creo que si uno compra un producto en base a una información y unas imágenes y lo que le dan no corresponde con lo que uno vio tiene derecho a sentirse así y a desconfiar de muchos mas cambios en el interior de la vivienda. Ya se mostraron igual de poco accesibles cuando se les hizo saber que algunas cláusulas del contrato eran dudosas en sus términos y se negaron a rectificar.
No es sólo que pongan paneles para ahorrar en montaje de ladrillos... es la actitud pasota de la constructora pues somos muchos los vecinos que hemos intentado saber si estudiarán otra opción que no deje las terrazas tan cerradas que parezcan un bunker y sin entrada de luz al interior de la vivienda, pero es un intento absurdo pues a lo mas que uno llega es a tener una respuesta de sus comerciales achacando "a sus jefes del Pais Vasco" la actitud como si así limpiasen la imagen de la oficina en Madrid.
Nos tienen pillados con una buena señal (60.000 euros) y clausulitas en el contrato que les habilitan a realizar esos cambios. Así que... ajo y agua. O trato de vender la vivienda (que cada vez me ronda mas la idea) o me veo obligado a dudar de la construcción de interiores que han hecho. Si han recortado en las terrazas por unos cuantos ladrillos... ¿porqué no recortar en multitud de materiales?