El problema actual del colegio no es ni que quitasen al antiguo director o la legalidad del proceso, ni que la directora nueva sea mejor o peor, ni si se estudia por proyectos, que se sigue haciendo.
Por lo que yo a día de hoy no matricularía a mis hijos en el Blas del Lezo es porque hay un grupo de padres que se creen que pueden acosar a la directora, a los profesores, a los padres que piensan distinto. Pintadas de todo tipo, carteles desacreditando y atacando a personal del colegio, quejas constantes por absolutamente todo, autobús con proclamas como que adoctrinan y secuestran a nuestros hijos en la puerta del colegio a la vista de los niños. Han seguido a la directora a su casa, y le han dejado carteles ahí y en el colegio de sus hijos. Pintadas por todo el barrio, twitter a diario desacreditando al personal del colegio. Así es imposible trabajar, sinceramente. Hay varias demandas contra padres admitidas a trámite por el juzgado, y me imagino que habrá más si la cosa continúa en esta línea.
Sinceramente, más allá de que estemos o no de acuerdo con el cambio de dirección, lo que esperamos los padres que condenamos todo esto es que la justicia actúe, y actúe rápido, para que la normalidad pueda volver al colegio de nuestros hijos, que son lo importante de todo esto.