Parla vive desde el pasado lunes dividida. Los habitantes de dos zonas básicas de salud, la de Isabel II y la de San Blas, tienen restringida su movilidad y no pueden ni entrar ni salir de su territorio. Las dos restantes, la de Pintores y la de Las Américas, no están dentro de las medidas impuestas por la Comunidad de Madrid, por lo que pueden entrar y salir del municipio, aunque no pueden entrar a las dos zonas restringidas salvo por los supuestos establecidos.
Por eso, dado que indirectamente los más de 130.000 habitantes del municipio también están afectados, el ay-untamiento ha solicitado a la Comunidad de Madrid que el confinamiento afecte a todo el municipio. “No tiene mucho sentido que la ciudad esté dividida en dos y que una parte de la población no puede acceder a la otra para hacer sus compras, para acceder a los servicios. Sería mucho más sencillo para los vecinos que todo el municipio tenga las mismas restricciones de movilidad”.
La situación de Parla, como sucede en los distritos de la capital y en otros municipios afectados por las medidas restrictivas es variopinta. Se da la circunstancia de que en algunas calles están confinados los vecinos que viven en los números pares, pero no así los que residen en los impares, como sucede en dos de las principales calles de la ciudad, la calle Real, donde se encuentra la estación de Cercanías, y la calle Pinto, una de las calles más comerciales.
https://as.com/diarioas/2020/09/24/actualidad/1600928523_981603.html