Yo si he oido a una madre que buscaba a Isidoro para que estuviera pendiente de la llegada de sus niños, también es él quien ha de decir a los niños que no zarandeen los arboles, que no jueguen al balón -caso omiso, pues al lado un padre jugaba con su niño con otro balón-, que no se suban a los pretiles, que no lancen piedras a las rampas de los garajes, ...etc. ¿Donde están los padres?.
También he oido a responsables de los niños cuando les "amenazan" con que van a llamar a Isidoro -convirtiéndole, así, en el temido "hombre del saco"- cuando delante de sus ojos están arrancando flores o sacando la tierra de los olivos.