En nuestra comunidad de propietarios, la junta directiva, solamente está constituida por un presidente y un administrador, y absolutamente nadie más.
El administrador nos ha enviado una convocatoria de reunión de junta general ordinaria, para el próximo mes septiembre.
El presidente, que por cierto es extranjero, ha vendido su propiedad hace poco tiempo, y se ha marchado definitivamente a su país, y según el administrador, posiblemente no piensa volver para presidir la próxima junta general ordinaria.
¿Alguien podría dar algún asesoramiento o consejo, sobre cómo debe actuar la junta de propietarios, cuando se dan estas situaciones no habituales?