Yo no le deseo ningún mal a nadie ; pero hay una justicia que funciona como un boomerang y todo lo malo y lo bueno que tu haces a otros, te vuelve y además multiplicado. Nadie que hace voluntariamente mal a otros se va de rositas. Allá cada uno con su conciencia. Nosotros estamos acostumbrados a ir por la vida con la verdad, sin dar codazos a nadie, sin engaños y deseando lo mejor a todo el mundo. Además, ¿de qué sirve hacer mal, engañar o querer estar por encima de los demás (en poder o en dinero), si al final todos nos tendremos que ir de este mundo y los bienes materiales que tengamos, ganados honestamente o no, tendremos que dejárnoslos aquí? Lo único que nos quedará entonces serán los buenos ratos que hemos pasado (por eso compramos nuestra casita), lo bien que hayamos actuado y lo bueno que hayamos hecho por los demás. El que proceda de una forma deshonesta, que haga daño y engañe (estoy hablando en general, no apunto a nadie) ese, no tengáis duda que tarde o temprano tendrá que enfrentarse con sus errores y tendrá de qué y por qué arrepentirse. ¿Ah! y no creo en el infierno, todo, todo se acaba pagando en esta vida, aunque no lo veamos. Lo que hay en la conciencia de cada uno de nosotros, sólo él lo sabe. Y creedme, hay muchas personas que no pueden dormir en paz.