A mi negro no le mireís, que su culo no ha sido ¡ja,ja,ja!. En serio, mi chucho donde pone el huevo voy a detras yo con la jodia bolsa, aparte ni de coña le dejo cagarse dentro, de la voz que le meto se le cortan las ganas al pobre ¡ja,ja,ja!.
Lo que si es cierto, que lo mismo al dejar todas las puertas alegremente abiertas, no es ni un perro vecino nuestro, si no gente de la calle que se pasa a curiosear o incluso perrillos que hay sueltos, el otro día me encontre a uno, pobrecillo. Eso si... richard, da gracias que no viene a cagarse el culo abierto que siembra el panico y otras cositas en Cedros.
Saludillos