Una noticia sobre Miramadrid:
http://www.abc.es/20110901/local-madrid/abci-ivima-casa-ruina-201108300729.html
Parecía un chollo, pero va camino de convertirse en una pesadilla. Cuando a Eva San José, de 26 años, le entregaron la casa de protección oficial que había estado esperando se sintió una privilegiada. Pensó que, al contrario que la mayoría de los españoles de su generación, para ella quedaba resuelto el problema de la vivienda. No fue así. Ahora, según denuncia, esa vivienda no es más que otro problema.
A los pocos meses de estrenar su casa, afloraron las primeras humedades, un problema persistente que desde entonces le ha obligado a desalojar en más de una ocasión. «Afortunadamente, mis padres viven cerca de aquí y me puedo ir con ellos», cuenta, pero resulta evidente que está harta de esta provisionalidad.
Su vecino, Arturo Vallejo, se inscribió como ella en el Ayuntamiento de Paracuellos del Jarama, localidad madrileña donde reside. También él se sintió dichoso, pero a la alegría le sucedieron la irritación y el hastío: «Lo primero fue que se inundara la terraza, que le causó una gotera a los vecinos; después hubo problemas con la instalación de la calefacción y finalmente llegaron los robos en los trasteros y en el garaje».
Sin respuesta
Lo peor, según cuentan, es la falta de respuesta de la empresa constructora, ya que ni el Ayuntamiento de Paracuellos ni el Instituto de la Vivienda de la Comunidad de Madridtienen ya responsabilidades sobre el inmueble, y en todo momento les remiten a la administración del inmueble, que no hace más que encadenar chapuzas en el edificio. El colmo llegó cuando denunciaron que habían robado del garaje un coche que tenía dentro el mando a distancia para acceder al aparcamiento. Tardaron tanto en cambiar el código que en el ínterin se produjeron nuevos robos.
Ya no saben qué hacer y se plantean incluso abandonar el piso que les tocó ¿en suerte? «En realidad, los 550 euros que pagamos por un alquiler con opción a compra no es tan barato si se compara con los precios que hay ahora en el mercado», comenta Arturo. Dentro de unos años, tienen que decidir si se quedan de alquiler o compran la casa. Podría ocurrir también que, dada la dificultad de conseguir un crédito en el escenario actual, no puedan suscribir la hipoteca que hace unos años pensaron que sería una ganga. Parece que no lo era tanto.