O sea que el presidente nos “informa” del toldo preferido… etc. ¿Y qué?
Ni siquiera me voy a molestar en recordar que eso no fue cierto, que la reunión ya se había dado por terminada cuando el presidente “informó” a los vecinos que quedaban en el pasillo de la sala de lo que fuese.
Ni siquiera me voy a molestar en protestar por una nueva manipulación. Parece que el presidente se ha creído que tiene alguna autoridad para tomar decisiones, cuando el presidente no es más que el representante legal de la comunidad y sólo puede decidir lo que la junta de propietarios le autorice a decidir .
En lugar de todo eso me voy a limitar a “informar” por este medio de que a mí esa tela no me gusta. ¿Sirve para algo mi “información”. No, al igual que tampoco sirve la del presidente, quien ha “informado” de una preferencia, no de ningún acuerdo. Es como si me dicen que la mayoría de los vecinos no sirven para decoradores. Bueno, ¿Y qué?
Yo hubiese preferido un acuerdo, el que fuese ; pero parece que algunos prefieren hacer las cosas de la manera que mejor sirva a sus preferencias. Aquí sí que hay intereses ocultos. Y si no los hay, al menos lo parece. Por lo menos, a mí me enseñaron que cuando se pueden hacer las cosas bien, si se hacen mal a sabiendas es porque es así como se quieren hacer, y hay alguna razón para ello.
Pero da igual. Es predicar en el desierto…
Analicemos la “información” y saquemos conclusiones. ¿Es obligatoria? No, porque no es un acuerdo. Entonces, ¿Por qué se fuerza el acta para incluir este punto que no se discutió? La mención respecto al cuidado necesario sobre la instalación parece que asume que ya se puede instalar este toldo. En realidad la única lectura que puedo dar a este “acta” es una autorización para colocar toldos, recomendando un modelo específico. Pues me doy por “informado” de que ya puedo poner el toldo. Y como las recomendaciones son recomendaciones, mi mujer y yo nos hemos “informado” mutuamente de que el modelo que nosotros preferimos es otro, que es el que vamos a poner en cuanto aparezca el primer toldo instalado, del modelo que sea. A fin de cuentas, no contravenimos ningún acuerdo, sino una simple “preferencia”.