morosidad

¿Qué hacer ante el incumplimiento de contrato en una cooperativa de viviendas?

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Cronología

Entro en la cooperativa a finales de 2005 - principios de 2006, para comprar un piso que se supone según información de Gestora Magallanes (se entregaría en abril de 2008).

Pago todo lo establecido en el contrato, pero llega abril de 2008 y el piso no ha sido terminado. Tengo una repercusión, con la que yo contaba al firmar el contrato, pero que estudiándola a fondo veo que corresponde en una gran parte a gastos financieros. Los gastos financieros se originan por un retraso en la construcción ; y parece ser, según información de la Gestora Magallanes, que estos retrasos se deben a problemas con un cable eléctrico de Unión Fenosa. Pero el cable en cuestión resulta que afecta a la primera fase de la promoción, no a la mía (la segunda), por lo que en principio no se debería retrasar la construcción por ese asunto. La Gestora Magallanes me lo explica (siempre hay una explicación aparentemente válida): resulta que en una cooperativa, no se puede entregar la segunda fase sin haber concluido la primera. Como entiendo poco o casi nada del tema me tengo que callar… Pero, se me ocurre mirar la ley de cooperativas y resulta que dicha ley manifiesta claramente la independencia de distintas fases de una promoción, por lo cual, dudo de la veracidad de lo que anteriormente contaba la gestora.

Mi contrato y el de todos los demás supongo, expresa la intención de la gestora de contratar con la constructora, que la duración de la obra no sea superior a 24 meses. Desconozco si al final se firma dicho contrato, pero si existe se debe cumplir ; y si no existe debería haber una razón para la inexistencia.

Ante esta situación puedo hacer varias cosas:
Si pago la repercusión y sigo adelante sé que habrá más (igualmente injustas ocasionadas por retrasos no justificados), y por tanto el precio final subirá y estará por mucho fuera de mercado.
También puedo pagarlas y darme de baja, con la certeza (según la gestora) de que se me devolverá lo aportado cuando algún socio ocupe mi lugar. Yo me pregunto: ¿quién querría ocupar mi lugar a este precio?
Puedo no pagar y entonces pasar a ser moroso y arriesgarme a penalizaciones impuestas por incumplimiento de contrato.

Opto por la tercera solución, puesto que ya no me fío de nadie. Sé que la desastrosa gestión de la Magallanes ha originado un enfrentamiento entre cooperativistas (morosos y no morosos), y que se pretende tomar acciones contra los que no hemos pagado. También supongo que los demás que no han pagado, tienen sus razones más que validas y por tanto no creo que nos quedemos de brazos cruzados si se pretende tomar acciones contra nosotros.