Pisos por avionetas en Cuatro Vientos
- El Ministerio de Fomento acepta el traslado del aeródromo madrileño, para el que la Comunidad de Madrid ofrece el suelo de Campo Real - Miles de nuevas viviendas se construirán en las 120 hectáreas que quedarán libres tras la operación
Javier Brandoli
Madrid- Rafael Simancas anunció ayer el cierre del viejo aeródromo de Cuatro Vientos y el traslado de su operativa a otro lugar de la región. Simancas, que asumió ayer el papel de portavoz del Ministerio de Fomento y casi de presidente de la Comunidad de Madrid, demostró que sus conexiones con el Gobierno central funcionan, y que él es un interlocutor válido para el Gobierno central a la hora de trasladar sus propuestas al Ejecutivo autonómico. Claro que, en el cierre de Cuatro Vientos, todo se está haciendo de una forma curiosa.
El pasado jueves, el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, lanzó tras la Junta de Gobierno su propuesta a Fomento para que se cerrara el aeródromo y hacer viviendas en su lugar. La propuesta llegó vía medios de comunicación al Ministerio -no hubo oferta formal-, y ahora ha tenido una respuesta similar por la vía de comunicación de Rafael Simancas. Mientras, en la Consejería de Infraestructuras contemplan cómo los demás hablán de un aeropuerto que tendrá titularidad regional. Y el Ministerio de Defensa, dueño del suelo del aeropuerto, tampoco habla, aunque hay sospechas de que la operación estaba pactada entre Gallardón y el anterior ministros, José Bono.
Un buen proyecto urbanístico. Porque lo que anunció ayer Simancas amplía un proyecto que ha tenido idas y vueltas. La operación Campamento, uno de los desarrollos urbanísticos más importantes que quedan por hacer en la ciudad, hará frontera con Cuatro Vientos ; las aeronaves volarán relativamente cerca de las casas, pero no hay que disparar las alarmas, ya que las medidas de seguridad aérea son férreas para evitar el paso de aviones cerca de núcleos urbanos. Otra cosa es que se aproveche esa presunta falta de seguridad para justificar el cierre del aeródromo y la operación urbanística.
Parece, en todo caso, que todas las administraciones y grupos políticos están de acuerdo en trasladar el aeródromo. Con las 120 hectáreas libres que quedarán tras el «vuelo» de Cuatro Vientos a otros terrenos, se conseguirá abrir una nueva vía urbanística en una ciudad que tiene ya, prácticamente, todo su suelo consolidado. Miles de nuevas viviendas, que al igual que en otros ensanches dejarían dinero a todas las administraciones y a muchas empresas privadas. No hay números aún, no se han sentado todavía en la mesa, pero tanto Ayuntamiento, como Fomento y Defensa (propietaria de los terrenos) sacarán tajada de esta operación, que evidentemente contaría con el suficiente número de viviendas protegidas para poner fotos y color en el trato. Se avecina una negociación larga, en la que todos querrán sacar el mejor provecho para sus intereses.
Sin noticias en la Comunidad. ¿Qué dice la Comunidad de todo esto? Primero, que se alegra de las intenciones de Fomento, explica la consejera de Infraestructuras, María Dolores de Cospedal. Pero también tiene algún reproche en la forma y el fondo. «Consideramos que el interlocutor en este asunto no debe ser Simancas, que ni siquiera es aún candidato de su partido para las próximas elecciones», dice Cospedal.
En Infraestructuras están sorprendidos con la respuesta que ha enviado el Ministerio a un proyecto que ellos, según cuentan, llevan reclamando hace tiempo. «Nos sorprende que no hayan contestado nunca a nuestra propuesta de ofrecer terrenos en Campo Real para que se construyera allí un nuevo aeródromo que sustituyera al de Cuatro Vientos», explican en la Consejería.
La Comunidad especifica que ya hace dos años que pidieron el desmantelamiento del recinto y que «nunca» han obtenido una respuesta, ni positiva, ni negativa. Ahora ya la tienen. Lo dice el portavoz del Ministerio, Rafael Simancas.